No vino ni el trío Midachi ni «La Tota», como lo llamaban algunos, a hacer alguna presentación, sino que fue el candidato a gobernador por el Pro Federal, Miguel Del Sel, quien visitó la ciudad el martes 3 de mayo y recorrió varios barrios para tener un panorama de Villa Gobernador Gálvez. Lo hizo junto al candidato a intendente, Hugo Carbonell y los aspirantes a ocupar bancas del Concejo.Durante la recorrida, que duró toda la tarde, se dedicó a caminar y a conocer a la gente de la localidad con sus necesidades. Un aspecto que se destacó del candidato es la simpatía y la predisposición para atender a cada uno que se le acercaba, incluso para sacarse fotos, teniendo en cuenta que el reconocimiento público se debe a su trayectoria como humorista. «Realmente siento muchísimo el cariño de la gente que me he ganado como humorista junto a Dady y al Chino», expresó Del Sel.
Luego de la caminata, brindó una conferencia de prensa en el local partidario del Pro Federal en donde hizo mucho hincapié en las necesidades de la provincia y en que la clave del progreso es la educación.
También dijo que la decisión de involucrarse en la política se debe a sus ganas de querer modificar la realidad santafesina. «Considero que Santa Fe es la provincia más rica del país y tenemos que sacar provecho de eso», expresó. Acto seguido agregó que él podría estar tranquilo en su campo, y trabajando solamente los fines de semana, pero que eligió hacer algo por la gente de su provincia. «Quiero hacer las cosas bien, porque no me quiero tener que ir de Santa Fe, quiero seguir caminando por las calles», argumentó. Además, manifestó que está disfrutando muchísimo de hacer la campaña porque no hace más que recibir cariño de la gente.
«Educación» fue el concepto más destacado a lo largo de toda su presentación y con respecto a eso opinó que él quiere ver una Santa Fe donde «los padres estén trabajando y los chicos en las escuelas».
En cuanto al análisis sobre Villa Gobernador Gálvez, el humorista dijo que la encontró mucho más grande de lo que pensaba. «Me imaginaba que tenía cerca de 80 mil o 90 mil habitante, pero después me dijeron que son más de 120 mil». También declaró que pudo observar que hay muchas promesas que no se cumplieron, por las calles rotas, la basura y la falta de obras públicas. «El tema de las cloacas, el agua, la luz y demás son temas que hay que hacer si o si –disparó–, no son obras muy difíciles de hacer, además son muy necesarias para cualquier ciudadano».
Entre bromas e intercambio de opiniones con los presentes, siguió apuntando a que VGG seguirá creciendo con el pasar de los años y llegará a convertirse en una de las potencias de la provincia.
Antes de finalizar su discurso, reiteró que está respaldado por un grupo de jóvenes profesionales que saben lo que hacen y volvió a resaltar sus ganas de que se pueda lograr una provincia mejor. «Basta del asistencialismo y los planes, quiero terminar con eso, porque los planes lo único que hacen es juntar votos y vagos», dijo.
Para rematar sus palabras, pidió por el apoyo de todos argumentando que lo único que él desea es que la gente esté un poco mejor.
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