Medio siglo trascurrió desde aquel 20 de junio de 1960, fecha en el que Floreal Luis Espierriz elaboró su primera tinta de imprenta, aquella que sería el puntapié inicial de una empresa exitosa que ya albergó a tres generaciones.Historias y anécdotas; crisis y crecimiento; nuevas sociedades e innovaciones, son parte de los 50 años transcurridos desde aquel inicio. Pero nada de ello hubiese sido posible, sin el esfuerzo y visión de don Floreal y su socio.
Por aquellos años, Espierriz se mudó a Villa Gdor. Gálvez con su familia. Con sus propias manos construyó su hogar, ubicado en calle Sáenz Peña 1629. Eran épocas duras, en las que trabajaba simultáneamente en dos empresas durante la semana, una de ellas, la fábrica de tintas SAER S.A. – segunda en importancia en el país–. Los sábados y domingos tampoco estaban asignados para el descanso, fueron los días dedicados a la pequeña empresa que estaba gestando.
En el garaje de aquella casa fue donde nació la sociedad ITAGRAF S.R.L. (Industria de Tinta para Arte Gráfico), sociedad compartida con Osvaldo Rosas. Los sueños se hacían realidad y, poco a poco, comenzaron a proveer de tinta de imprenta a importantes diarios como Tribuna, La Capital y Crónica, además de suministrar este insumo a las siete gráficas más importantes de Rosario.
Con la empresa en marcha, en 1965 se incorpora la segunda generación de los Espierriz; sería Luis quien aportaría un nuevo impulso al joven emprendimiento. La combinación entre los conocimientos adquiridos a través de su padre y la búsqueda de nueva información sobre el rubro, permitieron que cinco años más tarde la empresa anexe la producción de pinturas sintéticas, antióxido y horneables, bajo la marca KUBREX.
Serían insumos adquiridos por industrias agrícolas de gran envergadura, tales como John Deere Argentina S.A. y Gherardi, extendiendo las ventas a las provincias de Córdoba y Buenos Aires.
La demanda en aumento obligó a incorporar tambores con mayor capacidad. Así, a las tradicionales latas de 1, 5 y 20 kilos, se sumaron las de 50 y 200 kilos.
En el año 1980, producto de los avatares económicos protagonizados por el país, la sociedad Espierriz–Rosas se disuelve. Pero esta separación, lejos de ser un acontecimiento negativo para la empresa, significó la conformación de la nueva firma PINTGRA S.R.L., integrada por Luis Espierriz y su cuñado Atilio Travatori, que lanzó su línea completa de antióxidos y esmaltes sintéticos, y una variada gama de tintas offset y flexográficas para cartón.
A los pocos meses de su creación, SAER S.A., donde trabajara inicialmente Floreal Espierriz, recibió la noticia de que la sociedad quedaba en manos de una de las familias, llamada COLORCID, lo que motivó el ofrecimiento de sus máquinas para que PINTGRAF asumiera la elaboración de la producción. La propuesta significó más expansión.
En 1990, nació un producto para cubrir las necesidades de los fabricantes de bicicletas y electrodomésticos, en base a una línea completa de pinturas horneables.
Dos años más tarde, se sumaría la tercera generación, Sandra y Darío con aires innovadores y el empuje para seguir posicionándose en el mercado. Darío fue el encargado de desarrollar importantes mejoras en la calidad de los productos, más aún después de obtener su título de Ingeniero Químico en el 2002.
Los años fueron pasando, y en el 2008, Atilio Trovatori se retira de la firma, dando lugar a una nueva empresa y marca. La incipiente industria llevaría el nombre de PINTAGRAF S.R.L. y FLOROCOLOR sería su marca, en memoria de su fundador, don Floreal.
La actual producción comprende la elaboración de esmaltes sintéticos, antióxidos, esmaltes industrial; pinturas horneables, epoxis y látex; acrílicos, lacas y poliuretanos. También tintas offset, carbónicas, L.P., auxiliares, flexográficas al agua, tipográficas al agua y tipográficas.
Una completa línea de producción que satisface las demandas de las industrias papeleras, alimenticias, ferroviarias, metalúrgicas, navales, mineras, hidroeléctricas, energéticas, petroleras, agropecuarias, farmacéuticas, petroquímicas, hogar, obras y saneamiento.
50 años han trascurrido desde aquel 20 de junio de 1960. Continuando con la tradición fundada por Floreal, hoy están al frente de la empresa su hijo Luís y sus nietos Sandra y Darío.
En este significativo aniversario, toda la familia de FLOROCOLOR, conformada por dueños y empleados, agradece a todos los clientes, amigos y proveedores, que depositaron siempre su confianza y formaron parte del crecimiento constante de una empresa familiar unida por el color.
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