Realmente pedimos disculpa por las notas que no hayan podido salir en esta edición, pero quise tomar un pequeño espacio para un momento muy especial que va a repercutir en el futuro de la ciudad.
El 27 de septiembre nos toca la responsabilidad de ir a votar; se elegirán 5 concejales que reemplazarán a Alberto Mateos, Olga Coteluzzi, Rodolfo Cavalleri, Luis Sánchez y Diego Garavano. Solamente uno de ellos se ha vuelto a postular, es el caso de Cavalleri. De los otros cuatro, sólo uno es socialista y el resto pertenecen al peronismo.
Y aquí surge la reflexión: el “gonzalismo” tendrá que renovar su mayoría y para eso tendrán que entrar 3 concejales de su lista; es por ello que su mayor referente, que alguna vez quiso ser gobernador, se postula para concejal. Vale destacar que este puesto no será menor, si entra seguramente piensa en la presidencia. Pero eso no es lo más preocupante, sí lo es pensar en volver a vivir los últimos largos años de estancamiento que protagonizó la ciudad bajo su mando.
Alguna vez hicimos una editorial que hablaba de David y Goliat. Cuando en medios de Rosario salía la foto de un hombre con un cartel diciendo “Cayó Goliat”, nadie sabía en la vecina ciudad de dónde había salido. Sin embargo, debemos reconocer que si bien en la historia bíblica Goliat moría, políticamente aquí cayó pero volvió.
Decir esto no implica pertenecer a una agrupación política y utilizar este espacio con determinado fin. Simplemente significa que Villa Gdor. Gálvez tiene la oportunidad de vivir una historia diferente a la que estuvo sumergida durante largos años.
Como ejemplo me voy a remitir a otra historia bíblica: la salida del pueblo israelita de Egipto tras ser liberados del cautiverio. Ellos vieron el milagro de cruzar el Mar Rojo. Cómo no iban a creer que podían atravesar el desierto para llegar a la Tierra Prometida de donde fluía leche y miel.
Usted cree que esta no es una buena tierra. Por qué entonces Kichner esta bajando tanto dinero para la ayuda social (por llamarlo de alguna manera) a una de sus candidatas de la ciudad; por qué otros vuelven después de 16 años de gobierno. Para algunos medios de Rosario somos un polo productivo en el aniversario de la ciudad y una ciudad de pobres corazones en tiempos de elecciones.
Lo que pasa es que hay que cruzar el desierto para llegar a la Tierra Prometida. Muchos piensan que cuando estaban en Egipto era mejor, con pleitesías, subsidios y mayores comodidades. Pero saben qué les paso; a los israelitas por chillar y hacerse ídolos del oro dieron vuelta 40 años alrededor del desierto. Por supuesto esa fue una generación que no llego.
Podemos preguntarnos entonces: ¿podría sucedernos lo mismo a nosotros, ciudad potencialmente rica, y continuar igual si no pensamos antes de votar?.
Por eso, debemos pensar y luego votar. Pensar en las consecuencias de mi voto, no aislarme y no ir, comprometerme con el futuro de mi ciudad. Indudablemente el voto de cada uno de nosotros es importante, él es el que determina el futuro de todos.
Quizás algún día vean algún cartel que diga bienvenidos a la Tierra Prometida… aunque no sepan de dónde salió.
El 27 de septiembre nos toca la responsabilidad de ir a votar; se elegirán 5 concejales que reemplazarán a Alberto Mateos, Olga Coteluzzi, Rodolfo Cavalleri, Luis Sánchez y Diego Garavano. Solamente uno de ellos se ha vuelto a postular, es el caso de Cavalleri. De los otros cuatro, sólo uno es socialista y el resto pertenecen al peronismo.
Y aquí surge la reflexión: el “gonzalismo” tendrá que renovar su mayoría y para eso tendrán que entrar 3 concejales de su lista; es por ello que su mayor referente, que alguna vez quiso ser gobernador, se postula para concejal. Vale destacar que este puesto no será menor, si entra seguramente piensa en la presidencia. Pero eso no es lo más preocupante, sí lo es pensar en volver a vivir los últimos largos años de estancamiento que protagonizó la ciudad bajo su mando.
Alguna vez hicimos una editorial que hablaba de David y Goliat. Cuando en medios de Rosario salía la foto de un hombre con un cartel diciendo “Cayó Goliat”, nadie sabía en la vecina ciudad de dónde había salido. Sin embargo, debemos reconocer que si bien en la historia bíblica Goliat moría, políticamente aquí cayó pero volvió.
Decir esto no implica pertenecer a una agrupación política y utilizar este espacio con determinado fin. Simplemente significa que Villa Gdor. Gálvez tiene la oportunidad de vivir una historia diferente a la que estuvo sumergida durante largos años.
Como ejemplo me voy a remitir a otra historia bíblica: la salida del pueblo israelita de Egipto tras ser liberados del cautiverio. Ellos vieron el milagro de cruzar el Mar Rojo. Cómo no iban a creer que podían atravesar el desierto para llegar a la Tierra Prometida de donde fluía leche y miel.
Usted cree que esta no es una buena tierra. Por qué entonces Kichner esta bajando tanto dinero para la ayuda social (por llamarlo de alguna manera) a una de sus candidatas de la ciudad; por qué otros vuelven después de 16 años de gobierno. Para algunos medios de Rosario somos un polo productivo en el aniversario de la ciudad y una ciudad de pobres corazones en tiempos de elecciones.
Lo que pasa es que hay que cruzar el desierto para llegar a la Tierra Prometida. Muchos piensan que cuando estaban en Egipto era mejor, con pleitesías, subsidios y mayores comodidades. Pero saben qué les paso; a los israelitas por chillar y hacerse ídolos del oro dieron vuelta 40 años alrededor del desierto. Por supuesto esa fue una generación que no llego.
Podemos preguntarnos entonces: ¿podría sucedernos lo mismo a nosotros, ciudad potencialmente rica, y continuar igual si no pensamos antes de votar?.
Por eso, debemos pensar y luego votar. Pensar en las consecuencias de mi voto, no aislarme y no ir, comprometerme con el futuro de mi ciudad. Indudablemente el voto de cada uno de nosotros es importante, él es el que determina el futuro de todos.
Quizás algún día vean algún cartel que diga bienvenidos a la Tierra Prometida… aunque no sepan de dónde salió.
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