Cuando se acerca el Día del Amigo, sentimos que todos los que nos ayudaron a cumplir el sueño de este proyecto hecho realidad que es “Desarrollo Zonal”, son los que de una u otra forma son partícipes de cada una de nuestras salidas, sus notas, sus nuevos espacios.
“Nada hay nuevo bajo el sol”, pero todo se recicla y tiene un nuevo toque, pretendemos brindar a todos aquellos que nos dan su granito de confianza el mejor producto.
En una visita a un cliente, como muchas veces se da, nos empezó a contar historias familiares que nos dejaron atónicos, por supuesto será nota para una de las próximas ediciones y dijo una palabra “ellos lo hacían para la comarca”. Eso nos remontó a la Familia Ingalls, como me gustaba ver esa serie, los buenos ganaban y los malos perdían y los valores sobreabundaban.
Hoy nos sentimos en una comarca “muy especial”, donde hay buenos, malos y los valores existen, sólo hay que buscarlos.
No queremos ser ni utópicos, ni idealistas, pero cada buena acción ayuda a que se mejore la comarca. Sacar la basura a horario, no pintar con aerosol persianas “ si la querés a tu novia decíselo”, participar de todas las formas posibles “con más o menos tiempo” sin provecho alguno sólo el resultado de ver una sociedad mejor, es largo el listado. Muchos colaboran informando a este medio y hasta criticando, pero constructivamente.
Corren tiempos difíciles, la recesión y plagas como la gripe A, el dengue y los valores se han ido perdiendo. Pero creemos que desde nuestras páginas colaboramos al rescate de ellos. Y la buena noticia es que no lo hacemos solos muchos habitantes de la comarca nos ayudan. Pero la comarca esta creciendo y como a los chicos, los pantalones le quedan cortos y los puños se subieron. Y es ahora donde más tenemos que estar atentos a no perder lo que ganamos, a cuidar los espacios conquistados, a tener memoria, a usar la balanza del recuerdo y a pelear por rescatar los valores para nuestros hijos, para nuestros nietos y para las generaciones que vendrán. No seamos meros observadores de la realidad, no critiquemos si no hacemos nada, busquemos soluciones viejas o usadas y adaptémosla como hizo Luis Miguel con los boleros de Manzanero.
Desde nuestro puesto como medio tratamos de luchar contra la impotencia, contra el pesimismo, contra el alarmismo, no todo es color de rosa, pero tampoco todo es negro.
Sepamos ver más allá del bosque, aunque hoy damos gracias a esta comarca, vemos que su potencial es muy grande, fábricas, un casino a la puerta, un hotel en Alvear, y si de una vez por todas llegan las cloacas, esto tiene que cambiar. Pero tiene que crecer ordenadamente y esto depende de la dirigencia de turno y de cada habitante y por supuesto también nosotros como medio de comunicación tenemos nuestro rol.
El cambio cuando es para bien, cuesta, cuesta despegarse de las malas costumbres, de chiquito comíamos sin cubiertos, con la boca abierta, después cerramos la boca y aprendimos a usar los cubiertos. Hoy te toca una cena formal y tuviste que aprender protocolo y no dejaste de ser quien sos CRECISTE. Lo mismo sucederá con esta comarca no tiene que perder los valores, la memoria para poder CRECER EN SERIO. Es el profundo deseo de este medio de comunicación que hoy da gracias a su comarca, verla aún mejor, con la convicción de que se puede, sólo hace falta un puñado de habitantes se ponga la camiseta de la ciudad y crea que lo va a ver y luche por eso.
“Nada hay nuevo bajo el sol”, pero todo se recicla y tiene un nuevo toque, pretendemos brindar a todos aquellos que nos dan su granito de confianza el mejor producto.
En una visita a un cliente, como muchas veces se da, nos empezó a contar historias familiares que nos dejaron atónicos, por supuesto será nota para una de las próximas ediciones y dijo una palabra “ellos lo hacían para la comarca”. Eso nos remontó a la Familia Ingalls, como me gustaba ver esa serie, los buenos ganaban y los malos perdían y los valores sobreabundaban.
Hoy nos sentimos en una comarca “muy especial”, donde hay buenos, malos y los valores existen, sólo hay que buscarlos.
No queremos ser ni utópicos, ni idealistas, pero cada buena acción ayuda a que se mejore la comarca. Sacar la basura a horario, no pintar con aerosol persianas “ si la querés a tu novia decíselo”, participar de todas las formas posibles “con más o menos tiempo” sin provecho alguno sólo el resultado de ver una sociedad mejor, es largo el listado. Muchos colaboran informando a este medio y hasta criticando, pero constructivamente.
Corren tiempos difíciles, la recesión y plagas como la gripe A, el dengue y los valores se han ido perdiendo. Pero creemos que desde nuestras páginas colaboramos al rescate de ellos. Y la buena noticia es que no lo hacemos solos muchos habitantes de la comarca nos ayudan. Pero la comarca esta creciendo y como a los chicos, los pantalones le quedan cortos y los puños se subieron. Y es ahora donde más tenemos que estar atentos a no perder lo que ganamos, a cuidar los espacios conquistados, a tener memoria, a usar la balanza del recuerdo y a pelear por rescatar los valores para nuestros hijos, para nuestros nietos y para las generaciones que vendrán. No seamos meros observadores de la realidad, no critiquemos si no hacemos nada, busquemos soluciones viejas o usadas y adaptémosla como hizo Luis Miguel con los boleros de Manzanero.
Desde nuestro puesto como medio tratamos de luchar contra la impotencia, contra el pesimismo, contra el alarmismo, no todo es color de rosa, pero tampoco todo es negro.
Sepamos ver más allá del bosque, aunque hoy damos gracias a esta comarca, vemos que su potencial es muy grande, fábricas, un casino a la puerta, un hotel en Alvear, y si de una vez por todas llegan las cloacas, esto tiene que cambiar. Pero tiene que crecer ordenadamente y esto depende de la dirigencia de turno y de cada habitante y por supuesto también nosotros como medio de comunicación tenemos nuestro rol.
El cambio cuando es para bien, cuesta, cuesta despegarse de las malas costumbres, de chiquito comíamos sin cubiertos, con la boca abierta, después cerramos la boca y aprendimos a usar los cubiertos. Hoy te toca una cena formal y tuviste que aprender protocolo y no dejaste de ser quien sos CRECISTE. Lo mismo sucederá con esta comarca no tiene que perder los valores, la memoria para poder CRECER EN SERIO. Es el profundo deseo de este medio de comunicación que hoy da gracias a su comarca, verla aún mejor, con la convicción de que se puede, sólo hace falta un puñado de habitantes se ponga la camiseta de la ciudad y crea que lo va a ver y luche por eso.
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